No caigas en el error de creerte sincero y aprobarte a ti mismo diciendo que tú "eres así"; más bien estudia cómo debes ser y esfuerzate por llegar a serlo.
Cambia el "soy así" por el "tengo que ser asi". Eres "asi" pero, ¿estás seguro de que debe ser asi? ¿Te juzgas ya tan perfecto, que no tienes por que cambiar?
¿Piensas que lo que no son "asi" como eres tú, no son tan buenos como tú? ¿Porque ellos deben cambiar su modo de ser y tú debes seguir siendo como eres?
¿Piensas que lo que no son "asi" como eres tú, no son tan buenos como tú? ¿Porque ellos deben cambiar su modo de ser y tú debes seguir siendo como eres?
Hay en ti un complejo de superioridad y, en cambio, juzgas a los otros con criterio de inferioridad. ¡Piensas de ti con un convencimiento de perfeccionismo y autosuficiencia y mira a los demás con desprecio o al menos subestimación!
No basta que sirvamos a Dios; es preciso que cada dia lo hagamos con mayor perfección; ya a Abraham a Dios le habia trazado la senda: "camina en mi presencia y se irreprochable". Hasta que lleguemos todos a la unidad de la fe y del conocimiento pleno de Dios, al estado del hombre perfecto, a la madures de la plenitud de Cristo.
Armando de Lorenzi
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